Brasil es un país enorme, de hecho, es el quinto país más grande el mundo. También es uno de los países más poblados con cerca de 211 millones de habitantes.
Lógicamente, viajar a un país de este tamaño requiere una buena planificación porque hay muchísimas cosas que ver y las distancias son muy grandes. En esta guía de viaje incluye las mejores cosas que ver y hacer en Brasil, así como las ciudades y pueblos importantes que quedan cerca del itinerario.
Qué ver en Brasil
Río de Janeiro
Río de Janeiro es la ciudad más famosa de Brasil. Esta enorme y bulliciosa ciudad está repleta de la historia, la comida y las principales atracciones de Brasil.
Por supuesto, una de la festividad más importante es el Carnaval que se suele celebrar a mediados de febrero. Sin embargo, puedes explorar y disfrutar de la ciudad cualquier día del año.
Podemos tomar el teleférico para subir al Pan de Azúcar. Desde allí disfrutarás de unas vistas increíbles de la ciudad y de las montañas que la rodean. Puedes subir antes de la puesta de sol para disfrutar de un atardecer increíble.
También podemos visitar el Cristo Redentor, una de las atracciones turísticas más populares de todo Brasil. Lógicamente es un poco trampa para turistas… Pero es una de las 7 Maravillas del Mundo moderno, así que vale la pena visitarla. Puedes subir a pie y disfrutar de un agradable paseo. ¡Se ven monos por el camino!
No te olvides de disfrutar de la playa de Copacabana. No hay ninguna playa en el mundo con este ambiente. Reserva un día entero para disfrutar sin prisas. Tómate un coco, cócteles o cervezas en la playa.
Visitar las magníficas Cataratas del Iguazú
Las cataratas del Iguazú son unas de las cataratas más impresionantes del planeta. Este enorme salto de agua está formado por 275 cascadas que se extienden a lo largo de 2,7 kilómetros. Esas 275 cascadas están rodeadas de una exuberante y verde selva.
Las cataratas de Iguazú están situadas en el sur de Brasil, en la frontera con Argentina. Aunque el 80% de los saltos de agua están en el lado argentino, desde el lado brasileño también se pueden disfrutar. Eso sí, desde el lado argentino podemos acercarnos más y contemplar la Garganta del Diablo.
Desde Brasil, la ciudad que hay que visitar para ver las cataratas de Iguazú se llama Foz do Iguaçu. Se puede volar hasta aquí desde Río de Janeiro o Sao Paulo, o tomar un autobús nocturno. Desde Foz do Iguaçu, podemos explorar las cataratas por nuestra cuenta o unirnos a alguna excursión organizada.
Explorar el Parque Nacional Chapada Diamantina
El Parque Nacional de Chapada Diamantina es un parque nacional poco conocido que se encuentra a seis horas en autobús al este de la ciudad de Salvador (Brasil). El parque está repleto de lugares increíbles para visitar, como cuevas (algunas con piscinas de color turquesa para nadar), impresionantes excursiones y muchas cascadas.
En una visita al Parque Nacional de Chapada Diamantina, hay varias excursiones populares a las que puede unirse. Entre ellas están las visitas a Morro Do Pai Inacio, Pratinha, Gruta Lapa Doce, Poco Azul y Cachoeira da Fumaca (cascada de 360 metros).
Vive el Carnaval en Brasil
En Brasil se celebra la mayor fiesta del mundo… ¡El Carnaval! Celebrado cada año a finales de febrero, el Carnaval es la fiesta más loca que puedas imaginar x10. Se puede celebrar el Carnaval en todo Brasil y durante los 6 días todo el país y miles de turistas lo celebran.
Para los que no lo sepan, el Carnaval se celebra con lo que los brasileños llaman fiestas y desfiles de “bloco”. Estos son completamente gratuitos y se ubican en las calles de las ciudades. En Río, por ejemplo, puede haber 30 fiestas de bloco en toda la ciudad en un solo día, y algunas empiezan a las 7 de la mañana.
Las fiestas de bloco suelen contar con una banda de música y la fiesta se mueve por las calles como un desfile mientras todo el mundo la sigue. Habrá un punto de partida y un punto de llegada, y en ese punto final, habrá otra gran fiesta.
El famoso Sambódromo es algo diferente. Allí actúan los bailarines profesionales de samba con sus coloridos trajes. Estos bailarines no desfilan por las calles y esta competición es tomada muy en serio por las escuelas de samba profesionales que compiten. El Sambódromo no es gratuito y las entradas deben comprarse con antelación. Las noches más concurridas son las del fin de semana de Carnaval, ya que es cuando compiten las mejores escuelas.
Playa de Ilha Grande
Ilha Grande es un verdadero paraíso rodeado de playas vírgenes y aguas cristalinas. Desde Río de Janeiro, se tarda unas 3 horas en llegar a la isla, primero en autobús y luego en ferry. Una vez en la isla, se puede participar en muchas excursiones diferentes, disfrutar de caminatas cortas o largas, y también salir de fiesta si se tiene ganas.
Ilha Grande es la isla más famosa cerca de Río. Sus playas vírgenes y su ambiente divertido la convierten en uno de los mejores lugares para visitar en Brasil.
Caminata de los Dos Hermanos en Río
La Caminata de los Dos Hermanos (también conocida como Morro Dois Irmãos) es una corta caminata que lleva a un impresionante mirador con vistas a la ciudad de Río de Janeiro y, más concretamente, a la playa de Copacabana. Desde aquí se puede ver gran parte de la ciudad y las vistas son imprescindibles en Río.
Desde el inicio del sendero, se tarda unos 40 minutos en llegar al Mirador de los Dos Hermanos. Por el camino, podrás disfrutar de otras vistas, como la de la favela Rocinha, la segunda mayor del mundo.
Sin embargo, la Caminata de los Dos Hermanos no es la típica ruta de senderismo. La caminata comienza en la parte superior de la favela Vidigal. A pesar de estar en una favela, Vidigal es un barrio bastante seguro y hacer el camino es algo muy popular en Río de Janeiro. Aun así, es recomendable hacer la excursión por la mañana. No es muy aconsejable deambular por Vidigal de noche.
Las dunas de Natal
El noreste de Brasil está muy alejado de los caminos trillados para la mayoría de los visitantes. Pero los que se aventuren hasta allí podrán disfrutar de una cultura muy singular y hermosa… Y también de precios mucho más baratos. Esto se debe a que el noreste de Brasil es una región mucho más pobre en comparación con el sur, pero la cultura, el buen ambiente y la diversión están garantizados.
Natal es una pequeña ciudad con una enorme zona de dunas cercana que es un gran campo de juego para los buggies. Con los buggies podemos explorar la zona. Hay excursiones muy divertidas en las que podemos descubrir un oasis escondido.
Visitar el Salvador
Salvador es una ciudad influenciada por la cultura africana. Desde el arte, la danza y la música, Salvador es una ciudad muy rica culturalmente.
El Pelourinho es la parte antigua de la ciudad y la zona en la que sugerimos alojarse. Aquí se puede pasear por impresionantes calles coloniales, disfrutar de muchas actuaciones en directo, visitar museos y disfrutar de cenas y bebidas fuera.
Por supuesto, es una ciudad costera, así que también podemos hacer una excursión de un día a las playas cercanas de Salvador, como la playa de Arembepe. Esta pequeña playa se encuentra a 45 kilómetros de Salvador y alberga un pequeño pueblo hippy.
Playas de Florianópolis
La ciudad de Florianópolis no se parece a nada en Brasil. La mayor parte de esta bulliciosa ciudad costera se encuentra en la isla de Santa Catarina, por lo que está rodeada por todas partes de una costa virgen. No importa a qué parte de la ciudad vayas, nunca estarás lejos de la playa.
Las playas de aquí son algunas de las mejores de Brasil y, con más de 40 de ellas en los alrededores, podrás encontrar alguna tan animada o tan apartada como desees.
Lagoa da Conceição es la zona más popular para alojarse y, aunque está a un corto trayecto en autobús de la playa, es una pequeña ciudad con todo lo necesario para pasar unas buenas vacaciones.
Otra alternativa es en Barra de Lagoa. Se trata de una de las mejores playas de la ciudad y también está a poca distancia de otras playas estupendas y más aisladas.
No dejes de visitar también Lagoinha do Leste, considerada una de las playas más vírgenes de Brasil. Para llegar a la playa necesitarás calzado de montaña, pero eso es parte de la diversión que aleja a los demás. Puedes hacer la caminata usted mismo o tomar una excursión.
Los surfistas querrán alojarse cerca de Praia do Santinho y de la playa de Campeche. Estos son algunos de los mejores lugares para hacer surf en la isla y albergan buenas olas.
Comer en una churrasquería (barbacoa brasileña)
La churrasquería es una barbacoa tradicional brasileña y, mientras estés en Brasil, debes probarla. Unas cuantas cosas que notarás entre una típica barbacoa occidental y una Churrascaria es que les encanta usar brasas en lugar de una llama, y que cocinan la carne durante todo el día. Así es, a los brasileños les encanta cocinar pequeñas cantidades de comida durante todo el día y beber cerveza o cachaça mientras lo hacen.
Disfrutar de la riqueza cultural de Olinda
Olinda es otra ciudad del noreste de Brasil. El casco antiguo de Olinda es conocido como una de las regiones coloniales más bonitas de América Latina. La arquitectura colonial bien conservada reviste las calles empedradas y los pequeños cafés, las heladerías y los miradores del océano ofrecen a los visitantes mucho que hacer.
Olinda es vecina de la ciudad más grande de Recife, aunque Olinda tiene mucho más encanto. No es el lugar más popular para visitar en Brasil, pero es esa experiencia fuera de lo común la que hace que la visita a esta joya oculta merezca la pena.
Visitar Manaos en la selva amazónica
No se puede venir a Brasil sin visitar la selva amazónica, y el mejor lugar para hacerlo es Manaos. Esta pequeña ciudad es la capital del estado de Amazonas y es la base perfecta para explorar la selva.
La ciudad se asienta sobre el río Negro, que conecta con el Amazonas a sólo 10 minutos de distancia. Por su ubicación, Manaos es perfecta. Desde Manaos, puedes unirte a una gran variedad de excursiones que te llevarán por el río Negro y el Amazonas.
Relajarse en Pipa
Para aquellos que quieran escapar de las ciudades o de los pueblos turísticos más concurridos, Pipa es la opción perfecta. Este diminuto pueblo hippie sólo tiene unas pocas calles llenas de baches y está a un tiro de piedra de la playa. Las playas de aquí están poco concurridas y la cercana playa de surf tiene muchas y buenas olas.
No hay mucho que hacer en Pipa, pero de eso se trata. Con pocas atracciones importantes, excepto la relajación, el yoga, el surf y las visitas regulares de los delfines a la bahía, mantiene alejados a la mayoría de los turistas.
El Pantanal
El Pantanal es una región natural que abarca la mayor zona de humedales tropicales del mundo y las mayores praderas inundadas del mundo. Se encuentra principalmente en el estado brasileño de Mato Grosso do Sul, pero se extiende hasta Mato Grosso y partes de Bolivia y Paraguay. Se extiende por un área estimada entre 140.000 y 195.000 kilómetros cuadrados.
Aproximadamente el 80% de las llanuras de inundación del Pantanal están sumergidas durante las estaciones lluviosas, alimentando una colección biológicamente diversa de plantas acuáticas y ayudando a mantener una densa variedad de especies animales.
Este lugar tan singular a menudo se ve eclipsado por el Amazonas, pero no debes perdértelo. El Pantanal se divide en dos secciones, el norte y el sur. En el sur, la ciudad a la que hay que dirigirse se llama Campo Grande, y en el norte, Cuiabá. Desde ambas ciudades, se pueden realizar muchas excursiones diferentes al Pantanal.
El Pantanal sur es más bien una llanura de inundación y desplazarse hasta aquí es un poco más difícil. De hecho, muchos alojamientos utilizan aviones para llevar a los huéspedes a los hoteles.
En la región norte del Pantanal, es un poco más fácil explorar con una “carretera” principal llamada la Carretera Transpantaneira. Esto permite acceder a muchos alojamientos y excursiones por un precio mucho menor. La mayoría de las excursiones nocturnas acampan en el agua y realizan excursiones diarias desde allí. La zona norte del Pantanal es también el lugar para avistar jaguares.