Un musulmán es alguien que se identifica como seguidor de la religión islámica. Los musulmanes creen que su texto sagrado, el Corán, es la palabra absoluta de Dios tal y como fue revelada al profeta Mahoma.
Los musulmanes creen en la existencia de un Dios, al que se refieren como Alá. Se cree que esta deidad todopoderosa se ha comunicado a través de una serie de profetas terrenales, incluido Jesucristo.
A Mahoma, el fundador del Islam, se le considera “el sello de los profetas”. Los miembros de la fe musulmana se esfuerzan por llevar una vida agradable a Dios para ganarse un lugar en el Paraíso después de la muerte. Los textos sagrados de la fe musulmana incluyen el Corán, que se considera el testamento final de Dios, así como los hadices que documentan la vida y las enseñanzas del profeta Mahoma.
Además de Mahoma, entre los profetas islámicos importantes se encuentran figuras como Ibrahim o Abraham, cuya voluntad de sacrificar a su hijo Ismael desempeña un papel en la fiesta islámica del Eid-al adha. Los creyentes musulmanes citan a Isa o Jesús como uno de los profetas más significativos de la fe. Se cree que Isa recibió el evangelio de Alá (Dios). La larga historia del Islam también incluye una gran variedad de líderes influyentes como Muhammad Iqbal (1877-1938), Ruhollah Jomeini (1902-1989) y el Premio Nobel de la Paz Anwar Sadat (1918-1971).
Creencias y textos sagrados
Los Cinco Pilares del Islam constituyen los principales principios de la religión musulmana. La base de este sistema de creencias radica en:
- La profesión de fé: «No existe ningún Dios excepto Dios, y Mahoma es su profeta». Por otra parte, para ser musulmán no existe ningún rito de iniciación o bautismo, sólo es preciso recitar esta profesión de fe
- La práctica diaria de las oraciones: cinco veces al día, a horas determinadas y en dirección a la Meca, los fieles tienen que dirigirse a Alá con la oración. Una sola oración, la del mediodía del viernes, debe ser hecha en común y en la mezquita. Se recitan suras del Corán y siempre se repite la invocación «Allah akbar» («¡Alá es grande!»).
- La estricta observancia del Ramadán: el ramadán es el noveno mes del calendario lunar y es el mes en lo que comenzó la revelación del Corán. Desde el amanecer hasta el atardecer, los fieles han de abstenerse de comer y beber, de fumar y de tener relaciones sexuales.
- La entrega de limosnas: la limosna tiene dos modalidades: la ejercida espontánea y libremente para agradar a Dios y la reglamentada y obligatoria (zakat) según la cual todos los musulmanes han de aportar a los pobres y a la comunidad una décima parte de sus rentas y capital.
- La obligación de visitar el lugar sagrado de La Meca: por lo menos una vez en la vida, los musulmanes adultos que disponen de medios suficientes, tienen que peregrinar a la Meca y a la Gran Mezquita; ante la ‘piedra negra’ o Ka’ba, tienen que proclamar conjuntamente: «¡Aquí estoy, a tu servicio, oh Alá!».
Historia del Islam
Está ampliamente aceptado que la religión islámica comenzó durante la primera parte del siglo VII en las zonas geográficas de La Meca y Medina. Se cree que el profeta islámico Mahoma nació alrededor del año 570 y los musulmanes creen que empezó a recibir revelaciones de Dios (Alá) a la edad de 40 años. Tras huir de La Meca y entrar en Yathrib (más tarde llamada Medina), Mahoma se unió a un grupo de seguidores en lo que los musulmanes denominan la hijra, que se considera el inicio de la fe islámica.
En la actualidad hay más de mil millones de musulmanes viviendo en todo el mundo, lo que la convierte en la segunda religión más grande. Debido a que comenzó en Oriente Medio, el islam es la fe dominante en esta zona geográfica, así como en partes de África. El Islam es la religión principal en países como Afganistán, Argelia, Bangladesh, Egipto, Gambia, Indonesia, Irán, Irak, Marruecos, Pakistán, Arabia Saudí, Sudán, Turquía y Jordania. También hay poblaciones musulmanas significativas en India, Rusia y China, así como en partes de Europa occidental y Norteamérica.
El Islam sigue siendo una de las religiones de más rápido crecimiento en el mundo. Se prevé que en los próximos 20 años el número de musulmanes aumente un 35%. Esto es más rápido que la tasa de crecimiento prevista para otras religiones del mundo, como el cristianismo y el judaísmo.
Sólo en Europa se calcula que en un plazo relativamente corto los musulmanes representarán el 10% de la población total. Parte de la razón del crecimiento de la fe islámica es la alta tasa de fertilidad de sus seguidores, así como la edad media relativamente joven de los musulmanes actuales.
Sectas islámicas y escuelas de enseñanza
La fe islámica se compone de varias sectas distintas, cada una con su propio conjunto de creencias y prácticas. Las ramas de la religión incluyen a los suníes, chiíes, sufíes y ahmadíes. La mayoría de los musulmanes modernos se identifican como suníes, mientras que los chiítas se subdividen en doce, siete y cinco. Se considera que la secta sufí se adhiere a un sistema de creencias más místico, mientras que los relativamente nuevos ahmadiyyas derivan de las ramas tradicionales suní y chií del islam.
Relación con el cristianismo y el judaísmo
Tanto el islam como los cristianos son religiones monoteístas que comparten una serie de similitudes históricas. Tanto los musulmanes como los cristianos reconocen a Jesucristo como una figura clave en sus respectivas tradiciones, pero mientras los cristianos creen que Cristo era el Hijo de Dios, los musulmanes consideran su papel como el de un importante profeta.
Al igual que el Islam y el cristianismo, el judaísmo también tiene sus raíces en la región de Oriente Medio. Las tensiones entre musulmanes y judíos aparecen a menudo en las noticias debido al actual conflicto árabe-israelí que se libra por las reclamaciones de tierras. A pesar de los esfuerzos por lograr una solución pacífica, la violencia sigue asolando esta zona de Oriente Medio y parece que no hay ninguna solución en el horizonte inmediato.