Cuando viajamos a un país con una moneda muy débil como Indonesia, vemos que los precios se escriben como 150k en vez de 150.000, por ejemplo. Un día lo vi y me pregunté cuál era su origen.
Usamos la “k” para representar miles ya que su origen viene de la palabra griega χίλια (chilioi) que significa mil y su primera consonante se pronuncia como “ki”.
Los franceses tomaron la misma palabra griega “chilioi” y la modificaron a “kilo” (más corta y con otra escritura).
Con el tiempo se empezó a usar la palabra “kilo” como un prefijo (kilogramo, kilómetro, etc.) y muy pronto el mundo entero comenzó a usarla de esta manera con muchas unidades.
Más adelante la gente comenzó a utilizar la letra “k” sola como abreviatura de “kilo” y su uso resulta muy popular en todo el mundo (kg kilogramo, km kilómetro, kB kilobyte, etc.).