Diego Rodríguez de Silva y Velázquez (1599 - 1660) fue un artista español activo durante el siglo XVII que es considerado la figura más destacada del Siglo de Oro español.
Velázquez fue un pintor importante durante su época y el principal artista de la corte del rey Felipe IV de España. Su popularidad se extendió fuera de España a principios del siglo XIX, cuando su obra se convirtió en un modelo para los pintores realistas e impresionistas.
Desde entonces, Velázquez está considerado como uno de los pintores más influyentes de la historia europea y famosos artistas modernos, como Pablo Picasso, Salvador Dalí y Francis Bacon, le han rendido homenaje recreando varias de sus célebres obras.
A continuación, vamos a ver sus 10 cuadros más famosos.
Cuadros más famosos de Velázquez
10. EL TRIUNFO DE BACO
Conocido popularmente como Los bebedores o Los borrachos, este cuadro representa a Baco rodeado de varios borrachos. Baco es el dios romano de la vendimia, la vinificación y el vino. Su equivalente griego es Dionisio.
El cuadro puede dividirse en dos mitades, la izquierda centrada en la luminosa figura de Baco que se muestra en una pose relajada pero dominante; mientras que la derecha muestra a un grupo de borrachos en un ambiente de fiesta muy español.
9. APOLO EN LA FRAGUA DE VULCANO
Este cuadro representa el momento de la mitología grecorromana en que el dios Apolo visita a Vulcano, que está fabricando armas para el dios de la guerra Marte. Apolo le cuenta a Vulcano el romance de su esposa Venus con Marte, lo que provoca la sorpresa de todos los presentes en el cuadro, plasmada magistralmente por Velázquez. Algunas figuras del cuadro están delante de otras para crear una sensación de profundidad para el espectador, un método artístico conocido como emparedado espacial.
8. VIEJA FRIENDO HUEVOS
Durante su primera época, Velázquez fue conocido por sus composiciones de divertidas escenas de género. Entre sus mejores cuadros de esta época, Vieja friendo huevos representa una escena ordinaria de una anciana cocinando huevos, pero con gran oficio y detalles. En este cuadro, Velázquez ha utilizado el método artístico de fuertes contrastes entre luz y oscuridad, conocido como claroscuro. La Vieja friendo huevos está considerada como la mejor pintura de género de Velázquez y es su obra más famosa en este género artístico.
7. CRISTO CRUCIFICADO
Pintado por Velázquez durante su periodo medio, este cuadro representa a Jesús en la cruz inmediatamente después de su muerte. Obra de enorme originalidad y magistral en su fusión de serenidad, dignidad y nobleza, el Cristo crucificado se considera un punto de inflexión en el desarrollo artístico de Velázquez. Es el cuadro religioso más reconocido del artista y ha inspirado mucha literatura, especialmente el poema El Cristo de Velázquez de Miguel de Unamuno.
6. LA INFANTA MARGARITA TERESA CON UN VESTIDO AZUL
Este es uno de los varios retratos de corte realizados por Velázquez de la infanta Margarita Teresa, hija del rey Felipe IV de España y de Mariana de Austria; y que más tarde se convertiría en emperatriz del Sacro Imperio Romano Germánico desde 1666 hasta su muerte a los 21 años en 1673. El cuadro se considera un ejemplo de la inmensa habilidad de Velázquez como retratista. Sus retratos de niños de la realeza en sus últimos años se encuentran entre sus mejores obras y la Infanta Margarita Teresa con vestido azul es la más famosa de ellas.
5. LAS HILANDERAS
Aunque se creía que era una representación de las trabajadoras del taller de tapicería, la mayoría de los críticos de arte consideran que este cuadro es una representación de la Fábula de Aracne de Ovidio. En la mitología grecorromana, Aracne era una mujer mortal y una tejedora de gran talento cuyo orgullo la involucró en una competición de tejido con la diosa de la habilidad y la inspiración, Atenea. Durante la competición, el tejido de Aracne era más hermoso y también insultó al padre de Atenea, el rey de los dioses, Zeus. Esto hizo que Atenea convirtiera a Aracne en una araña, y es de esta fábula de donde proviene el nombre alternativo de arácnido. También conocida como La fábula de Aracne, Las Hilanderas fue pintada por Velázquez durante sus últimos años, cuando su talento artístico estaba en su apogeo. Se considera una de sus obras maestras más ambiguas y complejas.
4. LA RENDICIÓN DE BREDA
Este cuadro representa el intercambio de llaves que se produjo 3 días después de la rendición de la ciudad fortificada holandesa de Breda. El acontecimiento se produjo tras el asedio de Breda en 1624 por parte del ejército español durante su Guerra de los Ochenta Años contra los Países Bajos.
La obra maestra fue encargada por el rey Felipe IV de España como parte de las doce escenas de batalla a tamaño natural para el Salón de Reinos del Palacio del Buen Retiro de Madrid.
En Las lanzas, Velázquez eligió hábilmente ilustrar un encuentro humano en medio de la crueldad de la guerra. El cuadro está considerado como una de sus mejores obras y es reconocido en todo el mundo, pero especialmente en España, donde se encuentra entre las obras de arte más célebres.
3. Venus del espejo
El único desnudo que se conserva de Velázquez, La Venus del espejo representa a Venus, la diosa romana del amor, la belleza, el sexo y la fertilidad, con su hijo Cupido sosteniendo un espejo para ella. El cuadro fue comprado por el erudito inglés John Morritt en 1813 y lo colgó en su casa de Rokeby Park, en Yorkshire (Inglaterra).
Actualmente se encuentra en la National Gallery de Londres. La calidad tridimensional de la Venus del espejo (también conocida como Venus de Rokeby) hace que el espectador sienta la distancia. El efecto coqueto de la Venus que devuelve la mirada, el rico colorido y los cálidos tonos de la carne han contribuido a hacer de esta obra maestra una de las obras de arte con mayor carga erótica de todos los tiempos.
El cuadro saltó a los titulares en 1914, cuando fue objeto de vandalismo por parte de la feminista canadiense Mary Richardson, conocida como “Slasher Mary”. Se ha restaurado fielmente desde el acuchillamiento.
2. Retrato de Inocencio X
Durante un viaje a Italia, Velázquez se ofreció a pintar un retrato del Papa, quien le pidió que primero demostrara sus habilidades pictóricas. El retrato de Velázquez de su criado Juan de Pareja convenció al Papa Inocencio X de su talento y esto dio lugar a la creación de esta famosa obra maestra.
El retrato muestra una expresión tan despiadada de Inocencio que algunos temían que desagradara al Papa, pero Inocencio X estaba más bien complacido y, según la leyenda, dijo: “¡Troppo vero!” (“¡demasiado cierto!”).
El famoso pintor del siglo XX Francis Bacon pintó una serie de variantes de este cuadro denominadas “Papas gritones”, que ahora son famosas por derecho propio. El Retrato de Inocencio X es considerado por muchos críticos de arte como el mejor retrato jamás creado, mientras que The Guardian lo califica como el estudio más agudo del poder personal en la historia del arte.
1. LAS MENINAS
Considerado uno de los cuadros más importantes de la historia, Las Meninas representa en su centro a Margarita Teresa, de 5 años. La niña Margarita está rodeada por sus criadas, su guardaespaldas, dos enanos y un perro. A la izquierda, Velázquez se representa a sí mismo con un pincel. Sobre la cabeza de la princesa hay un espejo que muestra a su padre y a su madre, el rey Felipe IV de España y Mariana de Austria. Parecen estar en posición del espectador.
Tal vez Velázquez represente la escena en la que pinta a la pareja real. Se ha dicho que Las Meninas representa la “teología de la pintura” y “la verdadera filosofía del arte” por notables artistas. Es el cuadro más famoso de Velázquez, se considera su logro supremo y es una de las pinturas más analizadas de la historia del arte occidental.